Para que tu hardware se lleve bien con tu sistema operativo, es necesario disponer de los controladores adecuados. Windows acostumbra a proporcionarlos, aunque en ocasiones conviene usar controladores o drivers oficiales, en especial en el caso de tarjetas gráficas o de sonido.
Gestionar los controladores no siempre es tarea fácil, por lo que no está de más contar con una herramienta que haga ese trabajo por ti. Windows tiene su propio gestor de drivers para sus propios controladores, pero te proponemos una solución alternativa: herramientas para gestionar y actualizar tus controladores oficiales en Windows.
